Coach, coaching, son palabras relativamente nuevas que de un tiempo a esta parte se escuchan por todas partes pero, ¿sabías que fue alrededor del 450 ac cuando Sócrates inventó el coaching?
Pues efectivamente, Sócrates fue el primero en emplear y promover el diálogo como el mejor medio para motivar a sus discípulos a “alcanzar el conocimiento y la verdad”. Él lo llamó “El Arte de la Mayéutica” y básicamente consistía en hacer preguntas a sus discípulos para que fueran ellos mismos los que llegaran a sus propias conclusiones. Así que lo de preguntar para buscar solución… ¡Viene de lejos!
Y de Sócrates son también los 3 filtros que él recomendaba aplicar antes de hablar:
- El primer filtro es el de la VERDAD: ¿Estás absolutamente segura de que lo que vas a decir es cierto?
- El segundo filtro es el de la BONDAD: ¿Es algo bueno lo que vas a decir? (aunque no sea bueno, todavía puedes pasar al siguiente filtro)
- El tercer filtro es el de la UTILIDAD: ¿Será útil lo que vas a decir?
¿Te interesa saber un poco más sobre cómo aplicar estos tres filtros en tu día a día? Pues sigue leyendo:
Para empezar, puedes aplicarlo en tus conversaciones con los demás:
- Cuando vayas a decir algo, piénsatelo dos veces y, si lo que estás a punto decir, no es cierto, ni bueno, ni útil… guárdatelo para ti.
- Cuando alguien te venga con un chisme o cotilleo: pásalo por los 3 filtros y corta la cadena… así, evitarás difundir mentiras o información privada de terceras personas.
Simplemente con estos dos puntos, evitarás hacer mucho daño a los demás.
También puedes aplicar el triple filtro a tus pensamientos. Es decir, a las conversaciones que tienes contigo:
- Cuando empieces a hablarte y te digas frases tipo: “todo me sale mal”, “no valgo para nada” … ¡hazte un favor y para!… No es cierto, ni bueno para ti, y tampoco te será útil para solucionar tus problemas.
De esta forma, evitarás hacerte daño a ti misma.
Otro caso donde puedes aplicarlo es para filtrar toda la información que viene del entorno:
- Cuando recibas whatsapps de “supuestos expertos” o escuches las noticias, no las aceptes sin más: filtra y elimina todo lo que no pase la criba. Así evitarás difundir bulos y medias verdades.
Y, para terminar, puedes aplicarlo para decidir dónde pones tu atención y tu energía:
- Cuando tengas que enfrentarte a una (o a muchas) tareas piensa: ¿Es verdaderamente importante? ¿Es realmente urgente? ¿Es bueno para mí? ¿Es útil?… Si no pasa el filtro, olvídate y pasa a otra cosa. De esta forma, ganarás mucha energía y productividad.
¿Y tú? ¿Por dónde vas a empezar?